Los líderes mundiales no hacen nada ante las sequías e inundaciones sin precedentes en todo el planeta relacionadas con el cambio climático
Inundaciones en Pakistán | geographyblogwordpresscouk
El hemisferio norte viene sufriendo una serie de enormes catástrofes medioambientales provocadas por el cambio climático. Hay sequías devastadoras en China, Europa, Estados Unidos y Oriente Medio. Enormes ríos se están secando. Las olas de calor acompañan a las sequías. Al mismo tiempo, hemos asistido a inundaciones catastróficas en Pakistán y Afganistán.
Esto debería ser una advertencia para los líderes mundiales de que hay que hacer algo drástico a escala global. No basta con centrarse únicamente en sus propios países, como hacen la mayoría de los líderes. Emmanuel Macron, de Francia, se refirió a un punto de inflexión o gran agitación. Pero aparte de predecir el «fin de la abundancia» y advertir de futuros sacrificios, no tenía nada serio que ofrecer.
¿Liderazgo climático?
Parece que estos líderes se contentan con esperar hasta la próxima conferencia COP (COP27 en Egipto a finales de este año). A partir de ahí tendremos discursos nobles, pero si se parece en algo a las conferencias anteriores será lo de siempre y ningún intento de mostrar un verdadero liderazgo climático.
El empeoramiento de la situación exige una respuesta global. ¿Qué podrían hacer los líderes para frenar el cambio climático? En primer lugar, declarar una emergencia global, en la que puedan anularse las normas existentes que impiden actuar. A continuación, empezar de inmediato a reducir drásticamente la quema de combustibles fósiles y movilizar enormes fondos para las energías renovables y las tecnologías libres deCO2.
Los líderes actuales no tienen estómago para semejante acción. Necesitamos nuevos líderes y una ruptura con los sistemas económicos y sociales que impiden los cambios necesarios.
Inundaciones en Pakistán | geographyblogwordpresscouk
Sequías, inundaciones y cambio climático
El hemisferio norte viene sufriendo una serie de enormes catástrofes medioambientales provocadas por el cambio climático. Hay sequías devastadoras en China, Europa, Estados Unidos y Oriente Medio. Enormes ríos se están secando. Las olas de calor acompañan a las sequías. Al mismo tiempo, hemos asistido a inundaciones catastróficas en Pakistán y Afganistán.
Esto debería ser una advertencia para los líderes mundiales de que hay que hacer algo drástico a escala global. No basta con centrarse únicamente en sus propios países, como hacen la mayoría de los líderes. Emmanuel Macron, de Francia, se refirió a un punto de inflexión o gran agitación. Pero aparte de predecir el «fin de la abundancia» y advertir de futuros sacrificios, no tenía nada serio que ofrecer.
¿Liderazgo climático?
Parece que estos líderes se contentan con esperar hasta la próxima conferencia COP (COP27 en Egipto a finales de este año). A partir de ahí tendremos discursos nobles, pero si se parece en algo a las conferencias anteriores será lo de siempre y ningún intento de mostrar un verdadero liderazgo climático.
El empeoramiento de la situación exige una respuesta global. ¿Qué podrían hacer los líderes para frenar el cambio climático? En primer lugar, declarar una emergencia global, en la que puedan anularse las normas existentes que impiden actuar. A continuación, empezar de inmediato a reducir drásticamente la quema de combustibles fósiles y movilizar enormes fondos para las energías renovables y las tecnologías libres deCO2.
Los líderes actuales no tienen estómago para semejante acción. Necesitamos nuevos líderes y una ruptura con los sistemas económicos y sociales que impiden los cambios necesarios.