Cambio climático y crisis financiera en el Reino Unido
Cualquier cambio de sistema creíble para hacer frente a la crisis climática necesitará una amplia intervención gubernamental en el sistema bancario y los mercados financieros
Crisis financiera en el Reino Unido
La crisis financiera del Reino Unido demuestra que será necesaria una amplia intervención gubernamental para proteger el empleo y las pensiones durante cualquier cambio de sistema para frenar el cambio climático.
Las crisis política y del mercado en el Reino Unido fueron provocadas por las ignorantes ideologías de derechas de los líderes del Partido Conservador en el gobierno.
Como los gestores de fondos y los inversores creían que las políticas del gobierno conducirían a tipos de interés más altos, el valor de las inversiones de los fondos de pensiones cayó bruscamente.
Varios fondos de pensiones estuvieron a punto de quebrar antes de que el Banco de Inglaterra acudiera a su rescate comprando deuda pública.
La crisis tiene importantes lecciones para los activistas del clima que piden un «cambio de sistema». Existen estrechos vínculos entre el cambio climático y los sistemas financieros de todo el planeta que rigen las economías nacionales y mundiales.
Enorme gasto público
Cualquier cambio muy rápido hacia una economía neta sin emisiones de carbono requerirá enormes cambios en la organización de la sociedad humana, incluidas las economías capitalistas. El gasto público inicial sería enorme, lo que significaría que los gobiernos tendrían que pedir prestadas grandes cantidades de dinero o recaudar nuevos impuestos.
Estos cambios por sí solos provocarían inevitablemente graves perturbaciones en los mercados financieros, amenazando las pensiones, los ahorros personales, las finanzas públicas y el empleo.
Por ello, cualquier cambio creíble del sistema deberá ir acompañado de un cambio del sistema financiero, con una amplia intervención gubernamental en el sistema bancario y los mercados financieros.
La alternativa sería una crisis financiera crónica que conduciría rápidamente a una pérdida de apoyo popular al gobierno y a sus políticas.
Cambio climático y crisis financiera en el Reino Unido
Las crisis política y del mercado en el Reino Unido fueron provocadas por las ignorantes ideologías de derechas de los líderes del Partido Conservador en el gobierno.
Como los gestores de fondos y los inversores creían que las políticas del gobierno conducirían a tipos de interés más altos, el valor de las inversiones de los fondos de pensiones cayó bruscamente.
Varios fondos de pensiones estuvieron a punto de quebrar antes de que el Banco de Inglaterra acudiera a su rescate comprando deuda pública.
La crisis tiene importantes lecciones para los activistas del clima que piden un «cambio de sistema». Existen estrechos vínculos entre el cambio climático y los sistemas financieros de todo el planeta que rigen las economías nacionales y mundiales.
Enorme gasto público
Cualquier cambio muy rápido hacia una economía neta sin emisiones de carbono requerirá enormes cambios en la organización de la sociedad humana, incluidas las economías capitalistas. El gasto público inicial sería enorme, lo que significaría que los gobiernos tendrían que pedir prestadas grandes cantidades de dinero o recaudar nuevos impuestos.
Estos cambios por sí solos provocarían inevitablemente graves perturbaciones en los mercados financieros, amenazando las pensiones, los ahorros personales, las finanzas públicas y el empleo.
Por ello, cualquier cambio creíble del sistema deberá ir acompañado de un cambio del sistema financiero, con una amplia intervención gubernamental en el sistema bancario y los mercados financieros.
La alternativa sería una crisis financiera crónica que conduciría rápidamente a una pérdida de apoyo popular al gobierno y a sus políticas.